La Neumología es la especialidad médica cuyo campo de actuación se centra en la prevención, diagnóstico y tratamiento de las enfermedades del aparato respiratorio y, de forma más específica, a los pulmones, el mediastino y la pleura.
Tener tos persistente, ruidos en el pecho, dificultad para respirar así como dolor torácico o ronquidos exagerados al dormir son algunos de los síntomas que pueden alertar sobre un problema respiratorio. En estas ocasiones es bastante común acudir a un médico especialista en Neumología para tratar de forma eficaz los síntomas y evitar la progresión de una enfermedad respiratoria.
¿QUÉ PRUEBAS REALIZA UN NEUMÓLOGO EBN SU CONSULTA?
En la consulta de neumología el médico especialista recibe al paciente y le realiza una serie de preguntas para conocer su estilo de vida y su estado de salud. Para ello mantiene una entrevista con el paciente y le ofrece un cuestionario para poder saber cuáles son sus antecedentes familiares además de sus hábitos de vida. También en esta fase el neumólogo pide al paciente que le explique cuál es la causa de su consulta para poder conocer sus síntomas.
Tras la entrevista el neumólogo lleva a cabo la exploración física del paciente donde podrá observar cómo es su estado de salud e intentar averiguar la relación de éste con los síntomas que refiere.
En la consulta de neumología el médico podrá solicitar determinadas pruebas diagnósticas al paciente. Algunas de ellas se podrán realizar directamente en la consulta y, en otros casos, será necesario que se realicen fuera de consulta como la realización de una broncoscopia o un escáner de tórax.
Entre las pruebas más habituales en neumología encontramos las radiografías de tórax o escáner que sirven para que el neumólogo pueda observar el estado actual de los pulmones del paciente. Sin embargo, también son muy frecuentes las pruebas funcionales para conocer la capacidad pulmonar del paciente. En este caso se trata de la espirometría y la cooximetría. La primera se utiliza con mucha frecuencia en la consulta de neumología mientras que la segunda se utiliza sobre todo en pacientes fumadores para poder comprobar el efecto nocivo del tabaco en el sistema respiratorio del paciente.
Entre las enfermedades respiratorias tratadas por la neumología se encuentran: el asma bronquial, patología pulmonar infecciosa (neumonía, tuberculosis), síndrome de apnea-hipopnea durante el sueño (SAHS), cáncer de pulmón y las enfermedades derivadas del tabaquismo como la EPOC (enfermedad pulmonar obstructiva crónica) y el enfisema pulmonar.
Las causas de las enfermedades respiratorias son muy variadas, algunas como la EPOC y el cáncer de pulmón están relacionadas con el consumo de tabaco, también pueden guardar relación con la contaminación del aire que respiramos, en la Ciudad de Villahermosa (México) se llevó a cabo un estudio en el que se probó el efecto de la contaminación atmosférica sobre la salud de la comunidad, llegando a la conclusión de que se deben instalar redes que monitoricen la contaminación del aire para prevenir enfermedades.6 Otras enfermedades respiratorias son de causa infecciosa, como la tuberculosis y la neumonía, están relacionadas con la alergia como el asma bronquial extrínseca o bien se deben a la exposición a determinadas sustancias relacionadas con la actividad laboral, por ejemplo la silicosis de los mineros. Algunos trastornos que afectan gravemente a la función pulmonar son de causa genética, por ejemplo la fibrosis quística.
Entre las enfermedades respiratorias tratadas por la neumología se encuentran: el asma bronquial, patología pulmonar infecciosa (neumonía, tuberculosis), síndrome de apnea-hipopnea durante el sueño (SAHS), cáncer de pulmón y las enfermedades derivadas del tabaquismo como la EPOC (enfermedad pulmonar obstructiva crónica) y el enfisema pulmonar.
Las causas de las enfermedades respiratorias son muy variadas, algunas como la EPOC y el cáncer de pulmón están relacionadas con el consumo de tabaco, también pueden guardar relación con la contaminación del aire que respiramos Otras enfermedades respiratorias son de causa infecciosa, como la tuberculosis y la neumonía, están relacionadas con la alergia como el asma bronquial extrínseca o bien se deben a la exposición a determinadas sustancias relacionadas con la actividad laboral, por ejemplo la silicosis de los mineros. Algunos trastornos que afectan gravemente a la función pulmonar son de causa genética, por ejemplo la fibrosis quística.